Durante la pandemia, los profesionales sanitarios tuvieron que demostrar no solo ciertas habilidades médicas, sino también aquellas que van más allá de la disciplina, como la comunicación con el paciente o el control de las emociones. Vista la importancia de estas competencias transversales o soft skills, el Hospital Universitario de La Princesa decidió mejorar la formación de sus residentes en este sentido.
En el marco de un convenio de colaboración entre la Fundación Instituto de Investigación Sanitaria del hospital y el Instituto de Ingeniería del Conocimiento (IIC), se ha desarrollado una herramienta de evaluación que identifica los puntos fuertes y áreas de mejora de los MIR. Los primeros resultados de la prueba muestran que, aunque estos tienen un buen nivel de competencias en casi todas las áreas, obtienen un nivel más bajo en “Autocontrol”. Por otro lado, las competencias mejor valoradas fueron “Comunicación” y “Autoevaluación Veraz”.
Además, en esta primera experiencia, la herramienta de evaluación demostró excelentes garantías psicométricas, por lo que puede considerarse validada para emprender una segunda edición del programa. Los doctores Verónica Martín y Jorge Mendoza, especialistas del Servicio de Aparato Digestivo, han sido los responsables del proyecto junto a la Comisión de Docencia del hospital, que puede considerarse pionero en la evaluación de competencias transversales en profesionales sanitarios a nivel formal.
¿Qué competencias transversales necesitan los profesionales sanitarios?
Una de las claves del desarrollo de la herramienta de evaluación fue respaldarla en un modelo teórico que incluyera las competencias transversales imprescindibles para la actividad en el hospital. Además, estas tenían que aplicar a todas las especialidades, de manera que se consiguiera un modelo o prueba común para todos los profesionales sanitarios.
Así pues, se decidió evaluar 10 competencias transversales que, a su vez, se desglosan en 20 dimensiones y se dividen en tres ejes por su impacto en los resultados: instrumentales, interpersonales y sistémicas. En concreto, estas serían: pensamiento crítico, profesionalismo, práctica basada en el conocimiento científico, rigor y calidad médica, colaboración multidisciplinar, comunicación con familiares y pacientes, liderazgo y gestión de equipos, autonomía, autocontrol/gestión de emociones y autoevaluación veraz.
Formarse y alcanzar un nivel considerable en estas habilidades aseguraría un mejor desempeño de la profesión y, sobre todo, contribuiría a una atención más humana del paciente.
Adaptación de la prueba a escenarios reales del hospital
Otra de las claves de la prueba fue pasar de la teoría a la práctica. Los doctores involucrados en el proyecto ayudaron a las expertas en competencias del IIC a aterrizar las competencias transversales al contexto real de la medicina.
La prueba está compuesta por 114 ítems o preguntas que presentan evidencias de comportamiento fácilmente observables por el evaluado y sus tutores.
“La contribución del hospital ha sido determinante para enriquecer el contenido de los ítems y que hagan referencia a escenarios y situaciones concretos a los que se enfrentan en el día a día de su trabajo”
explica Virginia Arranz, experta en competencias del IIC. De esta forma, los residentes evaluados reflexionan frente a los enunciados y se autoevalúan de manera objetiva.
Resultados de la evaluación de competencias transversales de los MIR
El Hospital Universitario de La Princesa lanzó la prueba de evaluación de competencias transversales entre los meses de abril y julio de 2024, obteniendo un porcentaje de respuesta del 65% de los residentes de todas las especialidades. En total, la muestra estuvo compuesta por 220 médicos en formación.
Los resultados mostraron que los residentes tienen un buen nivel de competencias en casi todas las áreas. La que alcanzó un nivel más bajo fue la referida a “Autocontrol”, que se relaciona con la gestión de emociones propias y ajenas en situaciones de estrés, en la que hasta un 20% reflejaron un nivel “no adquirido”. Las competencias mejor valoradas fueron la de “Comunicación” con familiares y pacientes y la “Autoevaluación Veraz”, donde más del 50% obtuvo un nivel avanzado.
Vídeo sobre la evaluación de las competencias transversales de los MIREn vista de los resultados, en el hospital se están ya planificando acciones formativas que incluyen cursos, tutorías y entrevistas con los residentes. Gracias a esta herramienta, los tutores pueden ir más allá de la enseñanza del trabajo médico y valorar las competencias transversales para orientar y personalizar la formación de acuerdo con las necesidades específicas de cada MIR.