Independientemente de que una compañía decida implantar parcial o totalmente el teletrabajo, o una política más flexible respecto a tiempos y presencialidad, es innegable que las condiciones laborales actuales son distintas a las condiciones previas a la pandemia. Además, este cambio en las condiciones de trabajo no se limitará a lo que duren las medidas sanitarias por la COVID-19; probablemente, nuestra forma de trabajar cambie de forma permanente.
Es por esto que las organizaciones deben adaptarse a una nueva forma de trabajar, que suma la dificultad de la distancia física, por ejemplo, a los procesos de evaluación de los empleados.
Se necesitan nuevas métricas para conocer las dificultades y necesidades que surgen en esta situación. Una vez conozcamos los cambios que trae el teletrabajo, se pueden elegir las herramientas de evaluación de personas que nos proporcionen la información que necesitamos en este momento.
Evaluación de RR. HH. adaptada al teletrabajo
Para poder lograr un buen funcionamiento de los nuevos modelos de trabajo, resulta imprescindible no solo dotar a los trabajadores de los recursos tecnológicos necesarios para realizar el trabajo y garantizar una buena comunicación, sino también conocer bien a los profesionales, tanto de forma individual como las interacciones entre ellos.
En este contexto, serán útiles las pruebas de evaluación de competencias online, como las desarrolladas en el Instituto de Ingeniería del Conocimiento (IIC), para poder evaluar a candidatos y trabajadores a distancia, así como las pruebas que recojan esa nueva información sobre las características que han cobrado importancia en la situación actual y que necesitamos para mejorar el teletrabajo: competencias digitales, compromiso del empleado con la organización y satisfacción y la comunicación entre empleados, entre otras.
Herramientas de evaluación y análisis en el teletrabajo
Emplear herramientas de evaluación, directas o indirectas, es especialmente relevante en el contexto actual, ya que los profesionales de RR. HH. y los supervisores disponen de menor cantidad de información sobre aspectos importantes para la satisfacción y el desempeño de los empleados, al no compartir –o hacerlo durante menos tiempo– un mismo espacio físico de trabajo.
Afortunadamente, disponemos de herramientas de evaluación y análisis para RR. HH. que nos permiten obtener información sobre la situación y rendimiento de los empleados, incluso a distancia: herramientas psicométricas, evaluación de motivaciones y análisis de redes organizacionales.
Herramientas psicométricas
Permiten evaluar de forma fiable aspectos muy relevantes de los empleados, como su nivel de competencia digital -especialmente importante en un contexto de teletrabajo-, habilidades de trabajo autónomo y otras competencias transversales. De hecho, en estudios pasados, se observó la relación entre factores personales como la disciplina, la seguridad e independencia en el trabajo, la gestión del tiempo y las habilidades de comunicación, como factores de éxito para el teletrabajo.
Evaluación de motivaciones
Otro punto de interés donde las herramientas psicométricas aportan información precisa y útil es en la medición de motivaciones e intereses. Conocer qué produce satisfacción a los profesionales y cómo su puesto de trabajo se ajusta a sus intereses es imprescindible para fomentar y mantener su satisfacción en un contexto donde hay un mayor riesgo de que los trabajadores se puedan sentir desvinculados.
Análisis de redes organizacionales
En cuanto a las relaciones y la comunicación con los demás, este análisis cobra especial importancia cuando los profesionales no se encuentran juntos físicamente. De esta forma, a partir de la información que se va almacenando en las herramientas de comunicación interna, como email, Slack, Microsoft Teams, etc., se observa cómo se relacionan los trabajadores para conocer, por ejemplo, el nivel de comunicación entre distintos departamentos, qué miembros tienen un papel central en los equipos o quiénes se encuentran más aislados y se beneficiarían más de iniciativas que fomenten la creación de redes de apoyo entre compañeros.
Beneficios de la evaluación en el teletrabajo
El análisis combinado de estos y otros indicadores como, por ejemplo, el número y duración de intervenciones en una reunión virtual, permitirá, en primer lugar, realizar un seguimiento de la implantación del teletrabajo, detectar los factores que contribuyen a que dicha implantación tenga éxito e intervenir o introducir modificaciones en los planes en el caso de que se detecten problemas.
Además, comprender el comportamiento de los empleados y conocer sus competencias, permite mejorar otros procesos internos de la organización: los relacionados con la formación para dirigir acciones personalizadas, especialmente en competencias digitales, o los que tienen que ver con la comunicación, llegando a empleados que pudieran estar aislados en la nueva red.
La evaluación de competencias, en cualquier caso, permite identificar los puntos en los que incidir de cara a mejorar el bienestar y el desempeño de los profesionales. Si conocer a los empleados ha sido importante siempre, lo es más si cabe cuando no tenemos contacto directo con ellos y en este contexto de cambio.