¿Qué es la clasificación automática?
Muchas de las tareas que se realizan como parte de los procesos operativos y de negocio se centran en la organización de los datos para facilitar su gestión o automatizar su procesamiento. Se trata de procesos como:
Estimar la póliza adecuada
Estimar la póliza adecuada para un determinado conductor, en función de su riesgo.
Detectar
Detectar si una transacción bancaria es susceptible de haber sido realizada como parte de un fraude.
Catalogar
Catalogar a un potencial comprador según el impacto que una acción de marketing puede tener sobre él.
Identificar el tono y motivo
Identificar el tono y motivo de un mensaje o queja de un cliente, escrito en texto libre, y reenviarlo al gestor adecuado si procede.
Y otros muchos procesos más en los que se requiere la participación de expertos en el tema. Las técnicas de clasificación automática permiten apoyar y facilitar la labor de esos expertos, para que puedan analizar un volumen mucho mayor de datos a un menor coste.
¿Cómo funciona la clasificación automática?
La clasificación automática se basa fuertemente en la disciplina científica conocida como aprendizaje automático supervisado, que consiste en presentar diversos datos de clasificaciones pasadas, realizadas por expertos en el tema, a un sistema de clasificación. Dicho sistema analiza esos datos y, mediante algoritmos de aprendizaje estadístico, logra inferir el conocimiento del experto, imitando su labor.
El resultado de todo este proceso de aprendizaje es un sistema de clasificación con la capacidad de procesar grandes volúmenes de datos, y dar tiempos de respuesta mucho más bajos que los necesarios para un tratamiento manual. Además, el sistema es un elemento vivo, que puede realimentarse con nuevos datos para reajustar sus procesos de clasificación, garantizando así que se mantiene actualizado respecto a nuevas políticas de negocio o cambios de tendencia en los datos.
La explotación de estos sistemas de clasificación se realiza mediante la aplicación de reglas de negocio sobre las clasificaciones generadas por los mismos.
Para cada clasificación, el sistema genera un indicador de certidumbre o score que resume la confianza que el sistema tiene en su propia decisión. Esto permite establecer reglas de negocio como conceder automáticamente aquellas pólizas clasificadas como de bajo riesgo con un alto score, y derivar aquellas más dudosas a un experto analista. Esto permite reducir significativamente la carga de trabajo de los expertos, o aumentar el volumen de datos procesados con la misma cantidad de personal.
Beneficios y valor de las soluciones de clasificación automática del IIC
La clasificación automática ofrece:
Procesos automáticos
Procesos automáticos de clasificación de datos, menos costosos.
Mayor capacidad de tratamiento
Mayor capacidad de tratamiento de información, manteniendo el mismo personal.
Alta velocidad de respuesta
Alta velocidad de respuesta, permitiendo así servicios en tiempo real que serían imposibles si requiriesen un procesado manual.
Reglas de negocio más sólidas
Reglas de negocio más sólidas basadas en la seguridad de la clasificación automática.
Garantías de efectividad de las soluciones de clasificación automática del IIC
Los más de 25 años de experiencia del IIC en proyectos de clasificación automática y haber producido soluciones de alto valor en sectores como la detección del fraude en medios de pago nos avalan.
El IIC cuenta además con un grupo de profesionales de alto nivel en el campo del aprendizaje automático, que compaginan su actividad en el Instituto con labores de investigación, docencia y colaboración con universidades, manteniendo así un conocimiento actualizado de las últimas tecnologías. En particular, en el IIC se realizan labores de investigación en campos punteros entre las empresas tecnológicas más avanzadas. Este conocimiento y experiencia práctica en las diversas técnicas de clasificación automática nos permite desarrollar soluciones a medida, que cumplan los requisitos de tiempos de respuesta y efectividad necesarios en cada proyecto particular.
Las técnicas de clasificación automática permiten apoyar a los expertos y facilitar su labor para que puedan analizar un volumen mucho mayor de datos a un menor coste.