El 12 de marzo se celebró el desayuno Los retos de la Comunicación Interna en el auge de la tecnología corporativa, una iniciativa conjunta organizada por Alcor y el Instituto de Ingeniería de Conocimiento (IIC). Pablo Gonzalo, consultor y socio de Alcor, y Ana Jusdado, coordinadora de Social Business Analytics en el IIC, expusieron los factores que determinan el buen funcionamiento de la comunicación interna en las organizaciones, haciendo especial hincapié en el papel de la incursión de la tecnología social corporativa.
Los retos de la Comunicación Interna
Las principales inquietudes sobre cómo movilizar al empleado se centran en la innovación, la colaboración y la búsqueda de influencers que ayuden a viralizar el cambio. La digitalización del trabajo y las tecnologías sociales corporativas brindan nuevas oportunidades para la participación individual en las iniciativas de transformación, pero, para favorecer esta participación, es necesario adaptar estrategias de gestión que creen un contexto facilitador en la empresa. Aquí es donde entra la Comunicación Interna como vehículo de la transformación, a la par que soporte de una colaboración ágil e innovadora dentro de las empresas.
Para incrementar el desempeño organizacional en la era de la tecnología social corporativa es necesario impulsar cambios en la cultura empresarial. El reto está, entre otros, en establecer estrategias bien perfiladas, aplicar Analíticas Sociales a la medición de la transformación, conocer las formas más eficaces de cambiar las actitudes y comportamientos que facilitan la transformación digital y hacer partícipes a los empleados de dicha transformación.
Cómo podemos involucrar a los ‘influencers’ internos
¿Quiénes son los influencers de nuestra organización? Son empleados con capacidad para difundir las actitudes o los comportamientos según los valores de la empresa y que pueden potenciar los programas de cambio cultural que requieren las organizaciones.
Por ello, hay que aprovechar los recursos que se encuentran a nuestra disposición: identificar individuos y colectivos que favorezcan el cambio, medir sus interacciones de colaboración, establecer objetivos claros para la transformación, premiar a los facilitadores de dicho cambio y reconocer su labor. Es posible trazar un plan de acción, analizar la evolución de los cambios y medir los avances hacia los objetivos deseados mediante un diagnóstico claro de la situación real de las redes de colaboración existentes y de las personas que las forman.
Agradecemos a los asistentes su participación en el Desayuno, entendido como vehículo para la transmisión de conocimiento e innovación, que favorece el intercambio de ideas entre las organizaciones y redunda en un beneficio para todos.