El pasado mes de diciembre, en la Escuela Politécnica Superior (EPS) de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), se celebró la graduación de los estudiantes de Ingeniería Informática del plan conjunto Informática–Matemáticas, y de Ingeniería de Telecomunicaciones.
El IIC estuvo muy presente en el acto, ya que muchos de estos estudiantes, trabajan actualmente en el IIC o han colaborado en proyectos de investigación durante la carrera. Además, los tres alumnos con mejor expediente académico de la promoción recibieron una mención especial que no esperaban. Entre ellos estaba Sergio Gómez, premio al mejor expediente en la doble titulación en Ingeniería Informática y Matemáticas. Sergio trabaja actualmente en el área de Bioinferencia del IIC y compartió con nosotros qué se siente al recibir un premio de esa categoría.
¿Qué se siente al estar entre los mejores?
Como anécdota decir que yo no sabía que me darían el premio hasta que lo anunciaron en la ceremonia. Por lo visto todos los años lo habían comunicado antes pero este año decidieron que así sería más emocionante… De hecho fue una sorpresa bastante grande, tenía otro compañero con un expediente muy bueno y pensaba que le darían el premio a él.
Y nada, muy contento con el reconocimiento, la verdad. Es un poco una recompensa adicional a todo el trabajo de la carrera, a parte del título en sí mismo, claro.
¿Crees que esto se valorará en tu trayectoria profesional y te abrirá puertas en un futuro?
Ahora, recién salido de la universidad, es verdad que sí puede ser un factor importante a la hora de que una empresa se fije en tí antes que en otras personas; la nota en la carrera es de las pocas cosas que pueden utilizar para diferenciar a unos de otros antes de realizar una entrevista. Pero creo que a largo plazo dejará de serlo y será más importante la experiencia laboral que haber tenido el mejor expediente en la universidad.
¿A qué te dedicas actualmente en el IIC?
Entré el 4 de julio de 2011, justo un mes después de terminar el último examen de la carrera. Empecé en el área de Bioinferencia y, recientemente, he empezado a trabajar también en el área de Energy Predictive Analytics.
Primero en Bioinferencia, he estado sobre todo involucrado en el desarrollo de un producto llamado DIGNA. Antes de que yo entrara en el Instituto se hizo un estudio para ayudar a los doctores en el diagnóstico de Alzheimer. La idea era utilizar lo que aprendimos en ese estudio para crear un producto centrado en el Alzheimer pero con la idea de poder ampliarlo a otras enfermedades. Se utilizan los datos de los pacientes de alguna enfermedad para predecir su diagnóstico.
Después en el área de Modelado y Predicción colaboro en el proyecto Sipresolar. Se dan predicciones de la producción de energía solar para Red Eléctrica Española. Además, se combinan las predicciones de distintos agentes, incluido el IIC, para dar la predicción definitiva que recibe el Centro de Control de Red Eléctrica y que le sirve para poder hacer una gestión más eficiente de la producción de energía.